Lo peor en la política es ser desleal

“Todas las fuerzas son utilizables en nuestro movimiento si son nobles y leales y todos los hombres serán bienvenidos si vienen con lealtad y con sinceridad a servir bajo nuestra bandera.” Juan D. Perón

Sin dudas en los últimos tiempos estamos viviendo en Necochea posturas y mutaciones que no nos deberían sorprender, pero que sin embargo llaman la atención por la virulencia de algunas declaraciones de quien tuvo un apoyo que quizás no se merecía en la lista de octubre del Frente para la Victoria y de quién luego de meses de ser funcionaria de Tellechea, hoy lo critica. A mi entender posturas desleales que en política pueden dar un muy mal mensaje a la comunidad.

Cómo se puede confiar en políticos que mutan según las conveniencias, que no tienen la fuerza suficiente para defender sus posturas y van acomodándose a las conveniencias del momento abrazándose con quienes han destruido la ciudad en los 12 años anteriores a la llegada del Frente para la Victoria al gobierno municipal.

Sin dudas que muchos de los horrores cometidos en estos doce años mencionados fueron propulsados y sostenidos por este tipo de políticos que ponen por delante sus propios intereses sectoriales por sobre los intereses de la comunidad.

Quienes hablan de diálogo y consensos en realidad han “acordado” políticas que no ayudaron para que Necochea despegara de la mediocridad. Son los que “dialogaron” durante 12 años y no asumieron las responsabilidades necesarias en beneficio del distrito.

Podemos pensar que sus actitudes están conducidas por el convencimiento que ese camino que transitaron era el mejor para la política en la que creen, pero seguramente son conscientes que esta manera de hacer política no ayuda a que nuestro distrito salga del profundo retraso que sufre desde hace décadas.

La decisión del intendente Horacio Tellechea de transformar al distrito de Necochea no les gustó a muchos que han hecho de la política un coto cerrado donde como en un carrusel se van cambiando los lugares pero la sortija siempre la sacan los mismos.

La llegada de Roberto Porcaro a Necochea significó un cambio de timón en la política lugareña y esto significó romper varios acuerdos que existían desde hace años y con los cuáles varios estaban cómodos.

La ruptura de estos “acuerdos” comienza a dejar al desnudo algunos hechos que se han sucedido ininterrumpidamente en Necochea.

Secretos a voces que fueron convenientemente silenciados por los “medios profesionales” beneficiarios de importantes pautas publicitarias como parte necesaria de la tranza política que hundió a Necochea en lo más profundo.

Necochea mientras esté conducida por este tipo de políticos mediocres no tendrá futuro porque ningún funcionario nacional o provincial serio se va a arriesgar a trabajar para que mayorías circunstanciales sean el instrumento para impedir.

Sin dudas, que los desleales se saquen la careta es una muy buena señal para que los ciudadanos sepan a quienes no tienen que votar en agosto y octubre.