Horacio Castelli

La Declaración Universal de los Derechos Humanos debe ser el marco ético del periodismo. El derecho a la información es una condición fundamental para el desarrollo pleno de la democracia, así como para que los ciudadanos puedan opinar y actuar libremente. Los periodistas y las empresas periodísticas deben contribuir a que se respeten los derechos humanos, y su labor debe poner de manifiesto todas sus violaciones. Las nuevas tecnologías amplían las posibilidades de acceso a nuevos medios de comunicación: democratizan el derecho a informar y a ser informado, y favorecen el desarrollo del periodismo desde el enfoque de los derechos humanos. La independencia de los periodistas es vital para la sociedad y el periodismo es un servicio público a los ciudadanos que no puede estar sometido a intereses políticos o económicos particulares. La defensa de los Derechos Humanos es una de las tareas primordiales del periodismo y los periodistas no podrán ejercer su labor si sus propios der

Legisladores provinciales del Frente Para la Victoria presentaron un proyecto de declaración para adherir a los “21 Puntos Básicos por el Derecho a la Comunicación ” esbozados por las entidades integrantes de la Coalición por una Radiodifusión Democrática. Se trata de los senadores Mariel Urruti, Guido Carlotto y Hugo Gómez que realizaron la propuesta en vísperas al tratamiento de la Nueva Ley de Radiodifusión en el ámbito del Congreso Nacional. En los fundamentos de dicha iniciativa se destaca que “es indispensable una nueva Ley de Radiodifusión de la democracia, que tutele el pluralismo informativo y cultural, ya que el derecho a la comunicación es un derecho humano fundamental, que debe ser resguardado por todas las instituciones democráticas”. Establece que “se debe entender a la comunicación como un bien social necesario para el desarrollo cultural, educativo y económico de la población y esencial para el adecuado funcionamiento del sistema republicano, representativo, fe